Cuando el sol apenas nace,
El trabajador sale de su hogar
A cumplir su jornada diaria,
Que le permite traer el pan.
Esa jornada de ocho horas,
Que tanta lucha costò,
Murieron muchos obreros,
Para poderlo lograr.
Esos martires del pasado,
Que lucharon por un ideal,
Se parecen a los nuestros
En este tiempo real.
Obreros! Argentinos!
No se acobarden jamàs,
Levanten la bandera,
De la justicia y la paz..
MAROVI
miércoles, 8 de abril de 2009
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